Jorge Mario Bergoglio falleció este lunes a los 88 años. Su última aparición pública fue durante la misa de Pascua en el Vaticano, donde ofreció un mensaje final de paz y libertad.
El papa Francisco, líder espiritual de la Iglesia católica y figura influyente del siglo XXI, murió este lunes a los 88 años, según informó oficialmente el Vaticano a través de un comunicado leído por el cardenal Kevin Farrell.
A las 9:45 AM, el Cardenal Kevin Farrell, Camerlengo de la Cámara Apostólica, anunció la muerte del Papa Francisco desde la Casa Santa Marta, recordando su vida de fiel servicio y amor por los pobres. pic.twitter.com/CnkReI5BHN
— EWTN Vaticano (@EWTNVaticano) April 21, 2025
“El obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre a las 7:35 de la mañana”, expresó el texto difundido por el canal oficial del Vaticano en Telegram. Su fallecimiento ocurrió tan solo un día después de su emotiva aparición en el balcón de la Basílica de San Pedro, durante la celebración de la misa de Pascua.
BREAKING: El Papa Francisco falleció esta mañana, 21 de abril, en el Vaticano. El pontífice de 88 años nos enseñó a vivir los valores del Evangelio con valentía y amor universal, especialmente a favor de los más pobres y marginados.pic.twitter.com/I2Uu7vqpqG
— EWTN Noticias (@EWTNNoticias) April 21, 2025
Su última bendición, un gesto de fortaleza
A pesar de su delicado estado de salud, agravado por una neumonía que lo mantuvo hospitalizado durante más de un mes, el Papa decidió estar presente en la bendición “Urbi et Orbi”. Sentado en su silla de ruedas, ofreció un breve pero potente mensaje centrado en la libertad de pensamiento y la necesidad de la paz en el mundo.
Miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro lo ovacionaron conmovidos, conscientes de que esa imagen podía ser una despedida. Sus palabras resonaron con fuerza: un llamado a la tolerancia, a la fraternidad y a la esperanza, que ahora quedarán como su legado final.
Un argentino universal
Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires, fue el primer Papa latinoamericano y el primero jesuita en llegar al Vaticano. Su elección, el 13 de marzo de 2013, marcó el inicio de un pontificado transformador, que desafió estructuras, abrió debates y conectó a la Iglesia con los desafíos sociales, ambientales y políticos del presente.
Francisco pasará a la historia no solo como jefe espiritual de millones, sino como un actor clave en la escena geopolítica mundial, un mediador incansable, una voz firme frente a la injusticia y un símbolo de humildad y cercanía.
El legado que deja
Su muerte abre una etapa de duelo para el mundo católico y para millones de personas que encontraron en su figura un referente de humanidad. En Argentina, su país natal, se abre también un espacio de reflexión sobre cómo fue recibido y acompañado su liderazgo, y si se estuvo a la altura de lo que representó para la historia del país y del mundo.
La historia lo recordará como un Papa del pueblo, que priorizó el diálogo, la inclusión, la paz y el cuidado de los más vulnerables. Un pontífice que, con gestos sencillos y convicciones profundas, dejó huella en una Iglesia necesitada de renovación y en un mundo sediento de esperanza.