El congresista del Pacto Histórico asegura que hay una campaña de desprestigio en su contra y rechaza que el caso sea usado para frenar la reforma laboral.
David Racero, representante a la Cámara por el Pacto Histórico, rompió el silencio tras las acusaciones por presunta explotación laboral en un minimercado de su propiedad. En un video difundido en sus redes sociales, el congresista calificó las denuncias como un intento de sabotaje contra las reformas impulsadas por el gobierno y denunció una supuesta campaña de linchamiento mediático.
Las críticas surgieron luego de que la revista Cambio revelara unos audios en los que se cuestiona el manejo laboral del “fruver” de Racero, un negocio familiar que, según el propio congresista, fue liquidado debido a los efectos de la pandemia.
“No puedo permitir que se ponga en el foco mi nombre y con mentiras pretendan hundir la reforma laboral o la consulta popular”, declaró Racero, quien además aseguró que seguirá dando explicaciones públicas mientras avanza el proceso judicial.
Las reformas sociales del gobierno del cambio están por encima de un congresista. pic.twitter.com/G24wAjj9oh
— David Racero (@DavidRacero) May 26, 2025
“Ataques planificados” contra el Pacto
Racero fue más allá y habló de un supuesto “modus operandi” contra líderes del Pacto Histórico: “Hay una estrategia de aniquilación moral y linchamiento mediático contra figuras destacadas del movimiento”, afirmó.
Pese a su defensa, el caso provocó reacciones dentro de la misma coalición oficialista. Varios integrantes del Pacto Histórico respaldaron que se investigue a fondo al congresista.
El Pacto Histórico toma distancia
La senadora María José Pizarro, cercana a Racero, fue enfática: “Los principios que defendemos, el proyecto de país y las reformas están por encima de cualquier relación personal”. Agregó que apoya las investigaciones que ya cursan en la Corte Suprema de Justicia y la Procuraduría.
Por su parte, la representante María Fernanda Carrascal fue tajante: “No puede permitirse ningún viso de acoso, explotación o vulneración a los derechos laborales en nuestro movimiento”.
Carrascal también pidió que, además de las investigaciones judiciales, el caso sea revisado internamente por los órganos del Pacto Histórico.
Petro se pronuncia y se deslinda
Incluso el presidente Gustavo Petro se refirió al caso desde la Casa de Nariño. Sin mencionar directamente a Racero, envió un mensaje contundente que muchos interpretaron como una señal de ruptura con uno de sus antiguos aliados más cercanos:
“Cualquier militante que en su vida personal y política no se aferre a estos principios estructurantes debe ser examinado a profundidad (…) No debe estar con nosotros”.
Racero, quien tomó el juramento presidencial de Petro en 2022, ahora enfrenta un panorama adverso dentro y fuera de su bancada.