En el corazón del Pacífico colombiano, el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) continúa consolidando su presencia en el municipio de Nuquí con programas de formación integral, impulso al emprendimiento y certificación de competencias laborales, impactando a más de 1.100 habitantes durante este año.
Los procesos formativos han sido diseñados con enfoque territorial, incluyendo programas como cocina tradicional, pesca artesanal, ecoturismo, construcción liviana, tecnologías aplicadas a la biodiversidad y emprendimiento rural. Según la entidad, los instructores trabajan bajo un modelo de diálogo de saberes, fortaleciendo el intercambio cultural con las comunidades afrodescendientes e indígenas.
A través del programa CampeSENA y el Fondo Emprender, el SENA ha apoyado proyectos productivos locales enfocados en agricultura sostenible, turismo comunitario, y transformación de productos como el cacao y el coco, generando desarrollo económico y fortalecimiento identitario en la región.
En cuanto a la validación de conocimientos empíricos, más de 200 personas han sido certificadas en oficios como pesca, partería, cocina tradicional y construcción de embarcaciones. Estas certificaciones otorgan reconocimiento formal a saberes ancestrales y tradicionales.
El SENA ha desplegado equipos en lancha, moto y a pie para llegar a veredas y corregimientos apartados, llevando educación técnica a zonas históricamente marginadas. Según el director regional, esta presencia no solo representa formación, sino una apuesta por la equidad, la inclusión y la construcción de paz en territorios rurales.

