La jueza Sandra Heredia absolvió al expresidente por el delito de soborno a testigos, pero lo responsabilizó de intentar alterar procesos judiciales a través de presiones e intermediarios.
En un hecho histórico para Colombia, el expresidente Álvaro Uribe Vélez fue declarado culpable por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal. La jueza 44 de Conocimiento de Bogotá, Sandra Liliana Heredia, explicó que las pruebas demostraron que Uribe intentó manipular a testigos y alterar el rumbo de procesos judiciales en su contra.
Este lunes 28 de julio, la jueza Sandra Liliana Heredia leyó el fallo en el juicio que durante más de una década ha marcado la agenda política y judicial del país. Álvaro Uribe Vélez, quien fue presidente entre 2002 y 2010, fue hallado culpable de dos delitos: fraude procesal y soborno en actuación penal, aunque fue absuelto por soborno a testigos, al no comprobarse su participación directa en dicho acto.
Durante la audiencia, la jueza validó como pruebas legítimas las interceptaciones telefónicas realizadas entre el 12 y el 27 de marzo de 2018, descartando las objeciones de la defensa que alegaban irregularidades en su obtención. También fueron admitidas las grabaciones hechas por Juan Guillermo Monsalve desde la cárcel La Picota, con un reloj espía, las cuales fueron consideradas confiables y sin manipulación.
Heredia concluyó que Uribe conocía la existencia de las interceptaciones y aun así construyó una narrativa para justificar su conducta, lo que fue interpretado como una “escenificación” ante su abogado Diego Cadena, también investigado por este caso.
Además, la jueza resaltó la coherencia de los testimonios clave: los de Iván Cepeda (considerado víctima en este proceso), Deyanira Gómez (expareja de Monsalve) y del propio Monsalve, frente a la falta de credibilidad de los testigos presentados por la defensa del expresidente.
La jueza también recordó que este proceso no es un juicio político, sino uno de justicia. Enfatizó que el secreto profesional entre abogado y cliente no puede ser un escudo para encubrir acciones delictivas y que el sistema judicial debe proteger la verdad por encima de cualquier estatus o figura pública.
¿Qué viene ahora?
La defensa de Uribe, liderada por el abogado Jaime Granados, anunció que apelará la decisión. Tendrá cinco días hábiles para hacerlo, y será el Tribunal Superior de Bogotá quien deberá revisar el fallo. Si el tribunal confirma la sentencia, el caso podría escalar a la Corte Suprema de Justicia en casación, que tendría hasta cinco años para emitir un fallo definitivo.
Este proceso inició en 2012 cuando Uribe denunció al senador Iván Cepeda por supuesta manipulación de testigos. La Corte Suprema desestimó la denuncia contra Cepeda y, en su lugar, abrió una investigación contra el exmandatario, que hoy lo convierte en el primer expresidente condenado penalmente en Colombia.

