La petrolera estatal reafirmó su compromiso con el desarrollo del gas en el Caribe colombiano, pese al retiro de Shell de varios bloques claves.
Ecopetrol no se baja del barco. Luego de conocerse la decisión de la multinacional Shell de dejar de explorar hidrocarburos en aguas profundas del Caribe sur, la empresa colombiana aseguró que los proyectos que deja su socio siguen siendo viables y prioritarios para el país.
A través de un comunicado, Ecopetrol informó que junto con Shell ya se activó un plan para definir la mejor alternativa que garantice la continuidad de las operaciones en los bloques COL-5, Purple Angel y Fuerte Sur. En esta zona se encuentran importantes descubrimientos de gas como Kronos 1, Purple Angel 1, Gorgon 1 y 2, y Glaucus 1.
¿Por qué Shell se va y qué hará Ecopetrol?
La salida de Shell obedece a razones estratégicas globales de la compañía, que decidió ajustar su portafolio y priorizar otros mercados. Aun así, Ecopetrol aseguró que los proyectos son técnica y económicamente viables, por lo que se mantendrán los esfuerzos para su desarrollo.
“La maduración del proyecto de Gorgon y la gestión de su viabilidad socioambiental avanzan con miras a concluirse en el primer semestre de 2029. La producción iniciaría entre 2031 y 2032”, señaló Ecopetrol, que además ya explora alternativas de conexión al Sistema Nacional de Transporte para llevar el gas al mercado nacional.
La compañía también recordó que, aunque se termina la sociedad en estos bloques, Shell y Ecopetrol siguen siendo socios en el proyecto Gato do Mato en Brasil, junto a la petrolera Total. Este campo recibirá inversiones clave en 2025.
Los descubrimientos que marcaron una década
Los hallazgos de gas en el Caribe arrancaron en 2015 con el pozo Kronos, seguido por Purple Angel y Gorgon-1 en 2017 y 2022, respectivamente. Incluso, el expresidente Juan Manuel Santos los celebró como el mayor descubrimiento de gas en casi tres décadas. Se estimaba un potencial de más de 3 terapiés cúbicos, cifra superior a las reservas probadas actuales del país, que cerraron 2023 con 2,3 terapiés cúbicos.
Sin embargo, el proyecto enfrentó obstáculos desde el principio. Anadarko, el socio original, fue reemplazado por Oxy, que luego cedió el control a Shell en 2020. Tres años después, Shell también se va. ¿La razón? Las reservas encontradas no alcanzan el volumen que justifique las millonarias inversiones necesarias en infraestructura para su explotación.
La competencia: el proyecto Sirius gana terreno
Otro factor que influyó en la salida de Shell fue el avance del proyecto Sirius, liderado por Petrobras y Ecopetrol, también en el Caribe. Según Petrobras, este hallazgo representa el mayor descubrimiento de gas en aguas profundas de Colombia y comenzaría producción en 2029. Todo indica que ahora es la gran apuesta para recuperar la autosuficiencia gasífera del país.
¿Colombia se está quedando sola?
La salida de Shell no es un caso aislado. En los últimos años, grandes petroleras como Chevron, Repsol, ConocoPhillips, Cepsa y ExxonMobil han reducido o cesado sus operaciones en Colombia, particularmente en proyectos de fracking o de alto costo. Incluso Shell evalúa vender su participación en otros activos como el bloque COL-3.
No obstante, Ecopetrol mantiene firme su apuesta por el gas como energía de transición y asegura que el Caribe sigue siendo una región estratégica. “El éxito exploratorio del pozo Glaucus confirma la relevancia de esta provincia gasífera”, dijo la empresa estatal.
Por ahora, el futuro del gas en Colombia dependerá de encontrar nuevos socios dispuestos a invertir en infraestructura de alto costo, con un entorno que ofrezca garantías técnicas, jurídicas y económicas.
